Doctor Ingeniero de Montes y expresidente del Gobierno de Aragón, participó en el Ateneo para analizar el sector de la nieve y el futuro en los valles del Pirineo
La primera sesión del Ateneo de este 2023 arrancó con una mirada al sector de la nieve y a su aportación a la vida económica y social de los valles del Pirineo aragonés. El expresidente del Gobierno de Aragón, Santiago Marraco, como ingeniero de Montes y buen conocedor de los territorios de montaña, habló de la planificación de las estaciones de esquí y de su futuro, en una conferencia que se organizó con la colaboración del Colegio Oficial de Ingenieros de Montes en Aragón.
Marraco hizo un análisis del recorrido a lo largo de los años del esquí en Aragón, de los errores que se han cometido en su planificación y se refirió también a la necesidad de trabajar desde los diferentes ámbitos profesionales implicados y hacerlo desde el consenso para que sea un sector de valor para el medio rural, con una “visión global y una ejecución cuidadosa”.
En este sentido, dijo que el “proyecto de una estación de esquí es una tarea multidisciplinar. La crisis de las estaciones de esquí aragonesas pone de manifiesto errores en la planificación y en el modelo de negocio con el que fueron concebidas”, apuntaba Santiago Marraco. Según señaló, la información disponible por los equipos técnicos “es escasa y sesgada”. En su opinión, la experiencia acumulada permite, partiendo del análisis de los errores, formular algunos criterios técnicos de planificación.
El modelo de negocio basado en la idea de urbanizar, vender y obtener financiación para el desarrollo de la estación “ha fallado”, comentó en su conferencia. “El esquiador es nómada, -señaló Marraco- no es fácil venderles apartamentos y además, las propias urbanizaciones de estación han habido de competir con una mayor atracción de los propios pueblos de alrededor”. Insistió en la idea de que el esquí “es motor de economía de la montaña, pero las estaciones tienen que ser rentables por sí mismas, sin necesitar la ayuda pública”.
También aludió a las frases que se repiten a favor y en contra del esquí. La idea desde la política de crear uno de los mayores espacios esquiables, aun con las uniones pendientes, quedaría muy lejos de los grandes espacios alpinos y además “en el Pirineo apenas quedan zonas nuevas estaciones”. Apuntó que la unión de estaciones permitiría mejorar la competencia únicamente a nivel nacional.
Las voces en contra apelan a que éstas son mera especulación económica, algo con lo que se mostró totalmente en contra; al calentamiento global o al desarrollo de otras vías de turismo. Sobre el cambio climático insistió en la necesidad de adoptar medidas con urgencia y subrayó que el problema “no será no esquiar será no comer”. El esquí se ver afectado por la elevación de la isoterma de cero grados que hará que solo por encima de 1700 m sea viable esquiar, irregularidades en las precipitaciones; la nieve llega más tarde y con más irregularidad en la calidad y hay menos días de innivación artificial.
“El esquí complementa la temporada de verano”, comentó Santiago Marraco. Actividades como el veraneo, la caza y la pesca, las excursiones o la naturaleza traen actividad tres o cuatro meses al año, con dos meses punta, que se complementa muy bien con la temporada de la nieve.
Y ofreció cifras cuando habló de otro debate recurrente, el esquí es malo y el montañismo bueno, “comparación errónea –dijo- cuando hay más visitantes en verano que en invierno y ambos usos requieren servicios similares, hostelería, restauración, etc. Lo malo de la montaña es la saturación”. Puso como ejemplo las personas que pasan por las estaciones de esquí en España, en torno a 6,7 millones al año, frente a los 15,9 millones de visitas que reciben los Parques Nacionales que también generan cierto deterioro “por la presión de esos visitantes”.
En su participación en el Ateneo de la EINA, estuvo acompañado por el decano del Colegio de Ingenieros de Montes en Aragón, Ignacio Pérez-Soba Díez del Corral, quien actuó como presentador y moderador del coloquio que se abrió con los asistentes.
Santiago Marraco fue presidente de la Diputación General de Aragón entre los años 1983 y 1987 y director del ICONA desde 1988 hasta 1996. Es doctor Ingeniero de Montes por la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Montes de Madrid, donde concluyó sus estudios en 1962. Ingresó en el Cuerpo Superior de Ingenieros de Montes del Ministerio de Agricultura y fue destinado al Distrito Forestal de Huesca, organismo refundido en el ICONA.
Autor, entre otras publicaciones, de estudios sobre la gestión del agua y los regadíos; planificación de estaciones de esquí y agricultura en montaña. Ha realizado además distintos trabajos, como un inventario de espacios naturales a proteger en la provincia de Huesca; un estudio sobre la potencialidad turística del Pirineo o sobre la vía pirenaica de alta montaña.
Al Ateneo asistió también el director de la EINA, José Antonio Yagüe, y el director del I3A y de la Cátedra SAMCA de Desarrollo Tecnológico, Pablo Laguna.
El Ateneo de la Escuela de Ingeniería y Arquitectura (EINA) de la Universidad de Zaragoza está organizado con el respaldo de la Cátedra SAMCA de Desarrollo Tecnológico de Aragón y del I3A. Se celebra los miércoles cada quince días durante el curso académico.
Fotografías: Alfredo Soria (EINA)